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Diálogo Iberoamericano
Núm. 10 / julio-agosto 1997. Pág. 33
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Calderón: la actualidad de un clásico
"Calderón de la Barca es un dramaturgo tan
importante como Shakespeare, y ha escrito tragedias tan
reseñables como Hamlet; lo que ocurre es que se
conoce menos", según el profesor Ignacio Arellano.
Este catedrático, director del departamento de
Literatura, presentó el "Congreso internacional
sobre los autos de Calderón", que reunió el
pasado trimestre a cuarenta expertos, procedentes de las
universidades de California, Londres, Toulouse, Duke,
Carolina del Norte, Nueva York, St. Andrews, Oklahoma y
Münster.
Enrique Sueiro (Universidad de Navarra,
España). / El profesor Arellano reseñó
la labor investigadora de ámbito internacional coordinada
desde Pamplona. Se trata de un equipo interdisciplinar, compuesto
por filólogos y estudiosos del ámbito de la
Historia, el Arte y la Teología.
Esta tarea investigadora se desarrolla para recuperar a
nuestros clásicos. "En Calderón se puede recuperar
su escenografía y las formas expresivas, dramáticas
y literarias. Además, el corpus de los autos sacramentales
resulta tan interesante como asequible de investigar. Así
hemos iniciado este trabajo sistemático que -calculamos-
puede ocuparnos cerca de 20 años". Hasta ahora, en
colaboración con la editorial alemana Reichenberger, se
han editado veinte de los ochenta tomos previstos de las obras
de Calderón.
Entre los especialistas extranjeros, cabe destacar a John
Varey (Universidad de Londres), quien aseguró que si dos
genios de la Literatura clásica española como
Calderón de la Barca y Lope de Vega (siglo XVII) hubieran
vivido trescientos años después, muy probablemente,
habrían escrito sus obras para el cine y la
televisión. Según dijo, los clásicos
españoles emplearon en su tiempo los medios a su alcance,
y supieron dirigirse a diversos públicos, desde los reyes
hasta el pueblo.
El profesor Varey manifestó que "los españoles
han de redescubrirse a sí mismos en campos de gran
riqueza, como su teatro". Asimismo, ilustró el
interés británico por nuestra literatura recordando
la representación de "El alcalde de Zalamea" en el Teatro
Nacional de Londres, y un ciclo de conferencias -este mismo
año- sobre clásicos españoles. Para John
Varey, las condiciones que permiten llegar a un Siglo de Oro,
como el de España en el XVII, pasan por que un país
"crea en sus propias posibilidades y tenga conciencia de su
futuro".
Otro de los ponentes, Robert Lauer (Universidad de
Oklahoma), subrayó la cantidad de congresos que, acerca
del autor español, se celebran en Estados Unidos, sobre
todo, desde 1991. El profesor Lauer no ocultó su sorpresa
y satisfacción, ya que este tipo de obras tiene "mucho
éxito entre el público. Hay niños que se
quedan entusiasmados, con la boca abierta, y felices, ya que
escuchan una lengua tan preciosa y elegante y la entienden. Se
han acostumbrado a escuchar el teatro del Siglo de Oro, y a veces
creo que ni la televisión tiene tal éxito en los
niños".
Por otra parte, Celsa García Valdés, profesora
asociada de la Facultad de Filosofía y Letras y asesora
de la Consejería de Educación de la Embajada en
Rabat, confirmó el interés del país
norteafricano por el español: 28.000 alumnos de
Enseñanza Secundaria aprenden castellano en Marruecos y
cerca de tres mil universitarios cursan estudios
hispánicos en el país, dentro de los planes de
enseñanza del Ministerio de Educación Nacional
marroquí.
Los clásicos y el mercado
En su opinión, para recuperar a los clásicos
conviene, por una parte, contar con ediciones solventes de sus
obras: "los clásicos son muchos y con muchas obras, pero
sólo una mínima parte llega a los mercados, y no
siempre con garantías científicas". Por otra parte,
resulta imprescindible potenciar en la Enseñanza
Secundaria la lectura de los clásicos con más horas
de Literatura en los planes de estudio y una adecuada
formación de los profesores".
En cualquier caso, este empeño requiere una "gran
labor de imaginación. Un medio útil puede ser el
cine, como lo prueba la reciente película "El perro del
hortelano".
Por último, Celsa García Valdés sugiere
a las editoriales que conjuguen sus "legítimos intereses
comerciales con el apoyo a la edición de obras de
escritores clásicos. A veces se gastan cantidades ingentes
en premiar y promocionar obras de una vigencia efímera,
que hoy son y mañana nadie recuerda".
Calderón, embarcado en internet
A partir de ahora, cualquiera que sepa manejar
mínimamente un ordenador, podrá acceder a un
libro -probablemente el más completo que existe en
estos momentos- sobre los cerca de 80 autos sacramentales
de Calderón de la Barca. Y, a finales de año,
también desde Internet.
Marta Artica / Universidad de Navarra. / Su creador,
Rafael Zafra, profesor de Informática Aplicada de la
Universidad de Navarra, lo explica así: "Se trata de un
auténtico libro electrónico, que recopila los
textos completos, los estudios teóricos realizados sobre
ellos e incluso las ilustraciones del propio Calderón.
Será una herramienta de gran utilidad para la
investigación".
Rafael Zafra prepara su tesis doctoral en el Grupo de
Investigación del Siglo de Oro (GRISO) y ha presentado su
trabajo en este congreso.
El mismo Calderón definió los autos
sacramentales como "sermones puestos en verso". Se trata de un
teatro religioso simbólico inspirado en las Sagradas
Escrituras, en leyendas marianas o piadosas, etc., siempre con
un sentido alegórico. Es decir, los personajes son el
Hombre, el Pecado, la Fe, los Sacramentos... Algunos de los
más conocidos son "La vida es sueño", "El gran
teatro del mundo" o "No hay instante sin milagro".
En el siglo XVII los autos se representaban principalmente
el día del Corpus y gozaban de gran aceptación.
Concretamente, los de Calderón fueron los únicos
representados durante toda su vida, y ya muerto, hasta la
prohibición de los autos en el siglo XIX. Tal era su
maestría. La puesta en escena resultaba, asimismo,
impresionante, con enormes decorados en forma de torres de dos
pisos ("carros") que se montaban en las calles. Así,
recursos que se emplean ahora en el cine, como las
ensoñaciones o los "flash-back" (vuelta al pasado), ya los
utilizaba Calderón hace trescientos años.
"El GRISO publica varios tomos de autos al año, con
sus correspondientes estudios críticos, a partir de los
cuales he realizado el programa. éste permite leer los
autos y realizar las concordancias de modo automático. El
único modo de recopilar todos era crear una base de datos
para trabajar en CD-ROM".
Ciberespacio literario
El resultado de cuatro años de trabajo es un libro
electrónico, "en letras negro y sangre, al modo de la
época", que resuelve los problemas de las concordancias
clásicas. También se pueden obtener
estadísticas de frecuencia de palabras, realizar
búsquedas, hallar paráfrasis, etc.
Para finales de año se prevé que los
"navegantes del ciberespacio" puedan acceder al mundo de
Calderón a través del servidor web de la
Universidad, en las páginas del departamento de Literatura
Española diseñadas por Ivo Leahy, del CTI
(www.unav.es/literatura.htm
l).
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